Siguiendo por el Camino de La Alfranca se puede ver en los cables que penden de las torres de alta tensión estas espirales cuya finalidad es hacerlos más visibles a las muchas aves que por allí pasan y que, si no, sufren con ellos frecuentes accidentes en vuelo. Por eso se les llama los "salvapájaros".
Hoy he podido ver los preciosos abejarucos, cuya gran velocidad los hace muy difíciles de fotografiar. Aunque no sean de calidad, conseguir estas fotos me ha costado lo suyo.
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